31 enero 2016

Testimonio

BY enformacondios IN comments


Docente de lenguas y literatura por vocación,  de tal manera me apasiona escribir poesía, cuentos y ensayos. Nací  en  una familia grande, humilde, llanera  y conformada por 13 miembros; 11 hijos, padre y madre. Asimismo siempre fui fortalecida por valores y principios cristianos. Mi infancia fue muy especial porque conté con el amor de mis padres, especialmente de mi padre, quién fue consentidor y dedicado, él me infundió el amor a Dios y a la virgen María,. Me relataba múltiples historias tomadas de la biblia  por esta razón me animó a la lectura de  la biblia a temprana edad. 

 Me casé  muy joven  y olvide todo el amor a Dios  adquirido a través de mi infancia, quizás por dejarme llevar por el mundo y sus placeres, “Donde está tu tesoro, allí está tu corazón Lucas 12: 34” transcurrió normalmente, como sucede a cualquier matrimonio light:  un matrimonio mal llevado, sin cimientos bajo la roca firme de Dios. Asimismo nacieron mis dos hijos y tuvimos muchos problemas de pareja: infidelidad, irresponsabilidad y violencia intrafamiliar por parte de mi  ex esposo, entre otros inconvenientes.  Por lo tanto a comienzos del 2012 tome la firme decisión de separarme  y acudí a un retiro de Emaús: “Romanos 12:2 No sigan la corriente del mundo en que vivimos, sino más bien transformense a partir de una renovación interior” Los dos primeros días de retiro no sentía nada, estaba aburrida quería irme pero el sábado en la noche fui tocada por Dios, en consecuencia me sentí tan mal, por  dejarme llevar de las cosas del mundo y dejar a un lado a mi Señor. Pedí perdón, 1 Juan 1:9 Si confesamos nuestros pecados. El  que es fiel y justo, nos perdonara nuestros pecados y nos limpiara de toda maldad” me sentí renovada y amada por Dios a pesar de todos mis errores. No obstante al salir de nuevo al mundo, es difícil seguir con esa luz con la que  se sale del retiro, sin la ayuda de un guía o grupo que lo oriente. Fui caminando en Cristo, pero aún no me sentía plena.

En efecto a los tres meses, mi hija se enfermó gravemente sin que los médicos conocieran el motivo de sus desmayos. La hospitalizaron, tomaban exámenes muy fuera de lo normal. Los médicos me decían que podrían ser enfermedades  serias. En esos días de incertidumbre; sentí un fuerte llamado de mi buen Señor Jesús  a mi vida. Fui a la iglesia: hable con él desde lo más profundo de mi corazón y le suplique que mi hija estuviera bien, que yo lo amaba y quería estar siempre a su lado. “ Salmo 91: 14-15 “ yo lo pondré a salvo, fuera del alcance de todos, porque el que me ama y me conoce. Cuando me llame, le contestare; yo mismo estaré con él, lo librare de la angustia y lo colmare de honores” Dios me escuchó: mi hija si tiene un síndrome que se denomina Hipoglicemia cetósica benigna de la infancia, el cual, se controla con la rutina estricta en las comidas y especiales cuidados durante procesos virales o infecciosos que afronte. Lo más fácil de sobrellevar de todas las enfermedades que podría haber tenido según los médicos.

 Empecé a asistir a las reuniones del grupo señoras martes Regnum Christi, quienes ha sido mi principal eje de crecimiento espiritual a través de la charlas y el amor que ellas dan y  transmiten. Asisto a los servicios de retirosde Emaús donde he crecido en humildad y servicio. De la misma manera conocí la fundaciónCREO, la cual me ha renovado a través de su gran obra, Penitencia por amor.  Allí constantemente recibo mensajes de Dios por medio de  mi directora espiritual de la fundación, quién  ha sido un instrumento de Dios para  renovar mi vida  en la oración: la visita al santísimo, el santo rosario, ayuno frecuente y comunión diaria. He perdonado de corazón a mi  ex esposo; quién el pasado 4 de diciembre fue diagnosticado con cáncer de estomago y fue operado. Tuve la oportunidad de asistirlo  en su proceso post quirúrgico  y cuidar de él en nombre de Dios. "Una persona es grande cuando perdona, cuando comprende, cuando se coloca en el lugar del otro. Tener un corazón misericordioso no significa tener un corazón débil. Quien desea ser misericordioso necesita un corazón fuerte, firme, cerrado al tentador, pero abierto a Dios".  Frecuentemente hay tentaciones y no es fácil vivir en gracia con Dios pero con la oración y el ayuno gano las batallas del día a día. Tengo problemas económicos de mi pasado, pero con Dios he podido sobrellevar todo. “ Lucas 22:46 “Ora para no caer en tentación y 1 Pedro 5:7 Depositen en el todas sus preocupaciones, pues el cuida de ustedes”


Gracias a Dios después de dos años de proceso; obtuve la nulidad matrimonial. De la misma manera continuo en el proceso de sanación  emocional en la fundación CREO porque “No podemos amar con el corazón de ayer, es necesario que Dios lo renueve”  En mis visitas al santísimo he sentido la presencia viva de Dios hablándome de sus promesas; fruto de esas visitas es esté Blog, espero en él y  me abandono a él. El Señor me mandará un gran hombre a su debido tiempo, ese hombre  me amará y me respetará junto con mis hijos, mi perfecto complemento llegará a mi vida para cumplir los sueños de Dios, los míos y juntos conocer la verdadera felicidad, que es el servicio a los demás. SER PARA SERVIR. “Lucas 4-8 Adora al señor tu Dios y sírvele solo a él” Salmo 100-5 Denle gracias, bendigan su nombre¡ porque el Señor es bueno; su amor es eterno y su fidelidad no tiene fin” y TENGO LA CERTEZA QUE ESTOY EN LAS MANOS DE DIOS.  Amén.

2 comentarios:

  1. Mi muy querida, estimada y muy respetada profesora Dios te bendiga , cuide y guíe en este camino en el que por su inmensa gracia, amor y en su infinita misericordia has emprendido, espero que en su momento nos encontremos y hablemos.
    Un saludo cordial y un fuerte abrazo
    Dios te bendiga.

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  2. Muchas gracias por tu testimonio! Definitivamente nada es imposible para Dios, que en este nuevo comenzar Dios te dé la fortaleza para regalarla a otros y te permita servir. Por que sólo en el darse el hombre alcanza su plenitud y la mejor manera para darse es el servicio. Un gran abrazo! Sigue adelante!

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